Internacionales

EE. UU., Europa, Latinoamérica… la ultraderecha cercena los derechos de las mujeres

El avance de las políticas de ultraderecha en todo el mundo está suponiendo un importante retroceso para las mujeres y niñas.

De EE. UU. a Argentina, pasando por Centroamérica o Europa Central, los derechos más elementales de las mujeres son cercenados impunemente ante los ojos del mundo, según las organizaciones en defensa de los derechos de la mujer.

Esta políticas se traducen en:

Ataques contra el aborto, que ponen en riesgo la salud y la vida de niñas y mujeres.
La negación de la violencia machista, con el desmantelamiento de políticas de protección y la merma de fondos para casas de acogida o apoyos a víctimas.
Los refuerzos a los roles de género que quitan independencia y devuelven a las mujeres a su papel de madres y cuidadoras.
También las personas migrantes y la población LGTBIQ++ son víctimas de esta regresión, por los discursos racistas, homófobos y transfobos, el aumento de delitos de odio y recortes en servicios sociales que aumentan su vulnerabilidad.

El aborto en EE.UU., el inicio de la caída
En Estados Unidos, donde los derechos de las mujeres parecían consolidados, la mecha se encendió en 2022 con la sentencia de la Corte Suprema ´Roe versus Wade´.

Esto limitó la protección constitucional al aborto y provocó su prohibición en doce estados y limitaciones en otra veintena. Y la gasolina la ha puesto la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca.

«Estamos en una etapa de confusión, de caos, y atravesando una crisis de salud pública en materia de salud sexual y reproductiva», describe a EFE Alejandra Soto, directora de comunicaciones y medios latinos de Planned Parenthood Federation of America (PPFA).

Ella asegura que esta «fractura» acaba afectando más a las mujeres más pobres, a las racializadas y a las migrantes, que no pueden viajar hacia otros estados donde el aborto es legal.

En 2023, más de 166,000 viajaron a otros estados para recibir atención médica relacionada con el aborto, el doble que en 2020.

Para la directora de género, sexualidad e identidad de Amnistía Internacional (AI) Estados Unidos, Karla Gonzáles, las restricciones al aborto y a otros derechos son parte de «una agenda mucho más amplia» y «mundial» de la ultraderecha que tiene sus raíces en «el patriarcado» y la «supremacía blanca».

Según el último informe de AI sobre derechos humanos, en 2023 se aprobaron 84 proyectos de ley «anti-LGBTI» en Estados Unidos, cuatro veces más que el año anterior. «No ha sucedido de la noche a la mañana. Ahora con Trump se ha multiplicado», explica.

El presidente decretó que el Gobierno Federal solo reconozca «dos sexos, masculino y femenino» y se está retirando apoyos federales a los procedimientos de atención sanitaria a trans.

Las víctimas de violencia de género en todo el mundo también se van a ver afectadas tras el congelamiento de fondos internacionales para la lucha contra esta violencia, añade Gonzáles, quien cree que «casi un millón de mujeres ya no van a tener acceso».

Latinoamérica, pocos derechos y nuevos ataques
En muchos países latinoamericanos los derechos de las mujeres siguen anclados en el pasado, el aborto está prohibido y las tasas de violencia física y sexual y de embarazos infantiles son alarmantes. Todo se ha radicalizado con Javier Milei en Argentina o el salvadoreño Nayib Bukele.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba