La marcha Feria del Libro, seguridad y otros atractivos
Por María Eridania Montero Rojas
La poeta mexicana Sor Juana Inés de la Cruz no pierde vigencia. Leerla es reencontrarse con la esencia viva de la poesía. He vuelto a este singular poema donde la poeta nos presenta una estructura compleja y un contenido reflexivo. En cuanto al significado, el poema aborda la relación entre el autor y el lector, destacando la libertad del entendimiento humano y la subjetividad en la apreciación de la obra literaria. El poeta no busca agradar o recomendar sus versos, sino que deja la libertad al lector para juzgar y criticar.
El poema está compuesto por oraciones complejas yuxtapuestas y coordinadas. Sor Juana utiliza recursos literarios como la hipérbole, el interrogante retórico y la ironía. Las oraciones presentan una estructura gramatical correcta y una selección precisa de las palabras. A nivel morfológico, se observa el uso de tiempos verbales variados, sustantivos, adjetivos, pronombres y adverbios.
A través de sus versos, la poeta la independencia y libertad del entendimiento humano, así como la subjetividad en la apreciación de la literatura. Sor Juana no busca imponer su obra ni espera reconocimiento, sino que invita al lector a formar su propia opinión. Además, el poema reflexiona sobre la relación entre el autor y el lector, destacando la importancia de la libertad y la individualidad en la interpretación de la obra literaria.
El poema aborda temas como la libertad, la subjetividad, la relatividad de la valoración artística y la autonomía del entendimiento humano. Sor Juana cuestiona la necesidad de imponer una interpretación única y resalta la importancia de la libertad de pensamiento y juicio.
En resumen, el poema plantea reflexiones sobre la libertad del entendimiento humano y la subjetividad en la apreciación de la literatura. A través de una estructura compleja y recursos literarios, invita al lector a formar su propia opinión y destaca la importancia de la libertad de pensamiento.