Mientras las tensiones políticas y las preocupaciones sobre la seguridad de los datos continúan escalando, la aplicación podría enfrentar una prohibición definitiva en varios países clave, incluido Estados Unidos, lo que dejaría a millones de usuarios en incertidumbre.
Estados Unidos, el mercado más grande para TikTok fuera de China, es el epicentro de la controversia. El gobierno estadounidense dio un ultimátum a la plataforma: o se vende a una empresa estadounidense o se cierra en el país.
Esta medida está motivada por acusaciones de que TikTok representa una amenaza para la seguridad nacional, debido a su relación con ByteDance, la empresa matriz china.
A pesar de los esfuerzos para negociar una posible venta o un acuerdo de seguridad, el gobierno de Joe Biden no logró garantizar la permanencia de la aplicación en el país. TikTok dejaría de funcionar en Estados Unidos, afectando a más de 170 millones de usuarios.
Si bien el presidente electo Donald Trump había mencionado la posibilidad de una prórroga, el plazo oficial ha llegado a su fin sin una resolución clara, lo que genera preocupación entre los creadores de contenido y los usuarios de la app.
La lista negra global se expande
Mientras el debate sobre el futuro de TikTok en Estados Unidos sigue abierto, otros países ya han tomado medidas drásticas contra la aplicación. Desde Australia hasta Sudán, numerosos gobiernos han decidido prohibir TikTok, citando preocupaciones sobre la seguridad de los datos y la influencia política que podría tener la app en sus ciudadanos.
