Los mejores, peores y más sorprendentes momentos del debate presidencial en Estados Unidos
En el enfrentamiento titánico de 105 minutos entre la vicepresidenta Kamala Harris y el ex presidente Donald J. Trump el martes en Filadelfia, hubo ataques agudos, oportunidades perdidas y desvíos desconcertantes, junto con un preocupante número de menciones a animales. Aquí un repaso de los momentos que siguen sorprendiendo.
La flexión más improbable que habría sido inconcebible hasta hace poco: Harris, la candidata demócrata, presumió de “tener el respaldo del ex vicepresidente Dick Cheney y de la congresista Liz Cheney”.
La noción más vaga de una idea: Trump, respondiendo a una pregunta sobre lo que haría con el Obamacare, dijo: “Tengo conceptos de un plan”.
El mejor alarde sobre la Ivy League: Trump, al hablar de su plan económico, mencionó sus estudios en la Universidad de Pensilvania. “Miren, fui a la Escuela de Finanzas de Wharton y muchos de esos profesores, los mejores, creen que mi plan es brillante”.
El saludo más específico a un electorado de un estado clave: Harris, instando a Trump a “decirle a los 800.000 polaco-estadounidenses aquí en Pensilvania” cómo abordaría las ambiciones territoriales del presidente de Rusia, Vladimir V. Putin.
El mayor golpe de efecto: Harris, sorprendiendo a algunos espectadores, dijo: “Tanto Tim Walz como yo somos propietarios de armas”. Anteriormente, había mencionado que posee un arma para su seguridad personal.