Ulises Rodríguez, la cara de la innovación en la Alcaldía de Santiago
Vinicio Guzmán Luciano
Fue Juan Pablo Duarte el que propuso en su proyecto de Constitución la municipalidad como uno de los poderes del Estado, queriendo significar la importancia, la proyección y la trascendencia de lo que es el gobierno de una ciudad. Con esto se daba a entender que el Poder Municipal es de mucho más provecho y de más participación del ciudadano que cualquier otra, entendia Duarte que las puertas de una Alcaldía deben estar siempre abiertas tanto al servicio del ciudadano como a las propuestas de bien común, la transparencia, la descentralización y la participación, que el ciudadano este bien informado y consciente de lo que significan los arbitrios municipales necesarios para el mantenimiento de los servicios públicos que tiene que ofrecer el Ayuntamiento.
A propósito de la municipalidad como poder del Estado (pero que lamentablemente, no se le considera como tal) y el Alcalde como su representante, la ciudad de Santiago ha elegido al benemérito ciudadano Ulises Rodríguez (un distinguido hijo de Santiago) como su Alcalde Municipal, creyendo esta ciudad que por los méritos alcanzados en las instituciones donde ha colaborado como funcionario probado, se merecía tan alta distinción, eligiéndole como su Alcalde. Lo que se puede observar que con la honestidad, la transparencia, la capacidad de trabajo y de apego a las acciones éticas con que ha contado, puede lograr lo que muchos pensamos: la cara de la innovación de la Alcaldía de Santiago, porque una Alcaldía no es una institucion cualquiera, una Alcaldía su concepción no es recoger basura ni pintar murales, la Alcaldía es el gobierno de la ciudad, es decir, toto lo que tiene que ver con la ciudad y sus habitantes. Ulises Rodríguez debe entonces, hacerse acompañar de los mejores hombres y mujeres, competentes ciudadanos que hagan el trabajo juntos, para poder lograr esa cara de la innovación, personas que interpreten lo que se quiere y lo que es laborar para el bien ciudadano, en un pueblo como lo es Santiago, que cada quien haga su trabajo correspondiente y que la municipalidad recobre su lugar, llamando a la población a participar de las sesiones del Consejo, entre otras. De lo contrario, tanto esfuerzo para lograr la Alcaldía, sería en vano.
Santiago se merece una restauración como ciudad egregia y de prestigio de República Dominicana, esto es, restaurar el valor a la gente, del ciudadano, del humilde trabajador y el de la mujer esforzada y sacrificio de amor filial; no al clientelista, al que quiere todo para él, su familia y su grupo. Se debe restaurar esa relación ciudadano-alcaldía, ya que el compromiso es más con los electores, con los que son de todos los partidos, en fin, la Alcaldía es de la ciudad en general.
De todos modos, Santiago ha elegido a Ulises Rodríguez como el administrador de los bienes de la ciudad porque entiende que representa la cara de la innovación de la Alcaldía.